¿Cómo puedo ver el torneo?Lógicamente, acudiendo al Palau de les Arts los días 22, 23 y 24. Las entradas son un abono único de 64 euros para las tres sesiones.
¿En qué consisten las partidas?
Sobre todo, en un ajedrez dinámico. Los días 22 y 23 se jugarán dos partidas semirrápidas. Esto quiere decir que cada jugador dispondrá tan sólo de 25 minutos, más 5 segundos adicionales por cada jugada que concrete. Esto significa una hora por cada partida. Pero el día 24 aún será más veloz: las partidas serán de cinco minutos por jugador, más dos segundos por jugada hecha.
¿Las partidas duran más?
Las partidas de grandes torneos o títulos mundiales pueden durar perfectamente seis, siete horas... tanto como que un jugador puede tardar perfectamente tres cuartos de hora en ejecutar una jugada. Lógicamente, eso no permite popularizar a nivel mediático este deporte. Por contra, las partidas de Valencia serán extremadamente dinámicas.
¿Qué me encontraré en el escenario del juego?
Un auténtico equipo para disfrutar del espectáculo. Unas pantallas informáticas gigantes para observar los movimientos y unos auriculares para, en español o en inglés, escuchar los comentarios que irán haciendo maestros contratados a tal efecto.
¿Cuál es la conducta al asistir a una partida de ajedrez?
¡No tiene nada que ver con ningún otro deporte! Hay que guardar silencio absoluto. Nada de fumar, nada de teléfonos móviles y nada de hablar. Incluso, como en los toros, se pide encarecidamente no levantarse durante la partida. Nada de comida, nada de bebida... simplemente, estar atento a las explicaciones, la pantalla y, por supuesto, la posibilidad de levantar la vista y darse el gustazo de ver a pocos metros a dos auténticos mitos del ajedrez.
¿Es verdad que una transmisión de ajedrez en TVE fue seguida por 13 millones de espectadores?
Así como suena. El ajedrez se ha popularizado mediáticamente. Posiblemente, mucho más desde el enfrentamiento Fischer-Spasski y aún más tras los míticos enfrentamientos entre Karpov y Kasparov. Pues bien, en la segunda defensa de su título, en 1987 y en Sevilla, Kasparov necesitaba ganar la última partida para conservar el cetro. A Karpov le bastaba con sumar tablas para recuperar el título. Esa partida, y su extraordinario desenlace a favor de Kasparov, fue seguido por una cantidad de espectadores que ahora, con la dispersión de las audiencias, sólo la consiguen acontecimientos muy puntuales.
El ajedrez es un deporte preferentemente individual. ¿El jugador está solo?
A estos niveles, por supuesto que no. A su alrededor tiene una cohorte de entrenadores y asesores.
¿Cuáles son las principales necesidades de asesores?
Sobre todo, de tres tipos: técnico, psicológico y físico.
El equipo técnico es el que se encarga de preparar las estrategias de juego. Analizan las virtudes propias y los defectos del rival. Pueden pasar la noche previa preparando los movimientos a seguir. De hecho, con la llegada d ela informatizxación, un equipo que se previe puede tener millones de partidas y movimientos archivados.
El equipo psicológico es el encargado de la terapia con el jugador. El ajedrez es uno de los pocos deportes en el que hoy pierdes y mañana tienes que volver a jugar, por lo que la recuperación del ajedrecista es esencial para seguir tirando para adelante. Tienen que resolver los miedos y las decepciones del jugador. El ajedrez es uno de esos deportes de alta precisión en el que te puedes quedar «bloqueado»: no saber por donde moverte, como cuando la pelota «no entra» en la canasta o no hay manera de embocar un «putt».
La preparación física también es muy importante para mantener la tensión de una competición que requiere mucha concentración.
¿Qué papel tienen los asesores durante la partida?
¡Ninguno, más allá de mantener la boquita cerrada!. Aunque tengan su espacio propio, no pueden ni hacer escuchas ni gestos ni nada a su jugador. De hecho, con las últimas tecnologías se han suscitado polémicas (¿se va el jugador al cuarto de baño y recibe un mensaje por algún método electrónico?).
¿Cuándo se empieza a jugar al ajedrez?
Es uno de los deportes que más se practica en las escuelas y uno en los que los niños más posibilidades tienen de competir de igual a igual con los adultos. De hecho, es uno de los escenarios junto con gimnasia, tenis y alguno más, donde es más habitual la presencia de «niños prodigio». Sin embargo, la lógica dice que la iniciación suele empezar entre los 5 y 6 años. Tiene la ventaja de que es un deporte más de práctica que de entrenammiento, y eso motiva mucho al niño.
_________
